El otro día pude por fin experimentar el ver una película en el cine en 3D. Cierto es que últimamente no voy mucho al cine y también que tal vez la película no era la mejor de los últimos tiempos, pero me quiero centrar un poco en el concepto de 3D del que tanto se ha hablado últimamente y que en no pocas ocasiones se considera como la salvación de una industria en clara decadencia.
Por supuesto esto es una opinión muy subjetiva y basada en una única experiencia, por lo tanto hay que tomarla como lo que es, una primera, y probablemente no definitiva, impresión.
No pude evitar durante toda la película que una palabra me viniese una y otra vez a la mente y esa palabra era «artificio». Por algún motivo el cine 3D no me produjo la impresión positiva que hubiera podido esperar ante las expectativas abiertas y conociendo de antemano que existen alguna críticas. Finalmente mi primera impresión ha sido que las críticas al cine 3D cobran un peso importante que en mi humilde opinión convierten a los supuestos beneficios en meras anécdotas.
Mi cerebro no es el más potente y ni sofisticado de entre los hombres, lo admito, y sentí, sobre todo al principio, tal vez sea cosa de acostumbrarse, una importante saturación de información. Durante mucho tiempo, y de hecho durante casi toda la película, me estaba fijando más en el «efecto 3D» que en el propio filme.

También observé que había importantes fallos según qué planos. Me explico: en el cine 2D se suele usar el desenfoque del primer o segundo plano para centrar la atención del espectador según interesa a la historia. Este efecto carece de sentido en un cine 3D ya que al existir profundidad de campo por el efecto dimensional hace que todo quede totalmente artificial y fuera de lugar. Si ya existe efecto de profundidad ¿porqué crear un segundo efecto que además puede cambiar desenfocando el primer o segundo sujeto en función de lo que se quiera acentuar? Sin duda una película filmada debe ser filmada de dos maneras, una para 3D y otra para 2D y por lo tanto nunca será la misma película, sino una una versión de la otra.
Otra crítica fundamental es que en movimientos rápidos todo se desenfoca y más que cosas pasando, parece que una serie de fantasmas recorren la pantalla. La sensación de artificio e irrealidad se potencia.
No entraré en lo incómodo de las gafas, el hecho de tener que llevarlas puestas puede resultar enormemente molesto, aunque entiendo que es necesario. El caso es que es otro objeto más de incomodidad.
En general creo que puedo decir que por ahora la tecnología no me ha impresionado. Es posible que sea cosa de acostumbrarse, como he dicho, o de ver otras películas tal vez rodadas con mayor acierto, porque por ahora la sensación de artificio que enmascara la propia película me dejó un poco decepcionado. Tal vez me pase como antaño le ocurrió a mucha gente al ver las primeras películas en color o incluso sonoras. Mucha gente no las aceptó, cosa que ahora nos parece descabellado. Tras la experiencia de ver 3D por primera vez puedo comprender por qué en su día mucha gente rechazó la nueva tecnología del color o la sonora. Es muy posible que de forma artificial se potenciara más el efecto que la propia película. Afortunadamente con el tiempo la cosa cambió.
Estoy seguro de que el cine 3D está para quedarse y que en le futuro las películas se harán con 3D para todo y seguramente se harán bien, pero por ahora no me ha gustado demasiado. Espero poder ver alguna otra mejor adecuada a esta tecnología y que el veredicto sea distinto. Entre tanto las películas rodadas para 2D deben ser vistas en 2D y las otras, bueno, son y serán para 3D, pero veo difícil la convivencia de dos versiones de la misma película pues se ruedan explícitamente de forma distinta.
También sigo prefiriendo la historia, el argumento, la interpretación a los efectos. Demasiadas ilusiones ópticas dejan a la historia en un innecesario segundo plano. Tal vez potenciar los efectos sea necesario ante la falta de originalidad que demuestra la industria del entretenimiento masivo, pero creo que la industria del cine debería esforzarse más en hacer nuevas y mejores historias que en reinventar la rueda. Ningún artificio va a ocultar una película mala y en cambio puede echar a perder una película buena.
Tal vez sea demasiado tarde para cuando la industria del entretenimiento se de cuenta que a veces no es la calidad de imagen lo que la gente busca, sino la calidad humana de una historia bien contada, no solamente contada de una forma llamativa.
Muchas gracias, quedan bien mis fresitas ! 😉
Gracias a ti. Me encanta la foto y queda muy apropiada en el artículo 😉
En breve: ¡Un guión, dadme un guión!
Sí, supongo que al final se trata de eso. Pero temo más que buenos guiones se vean eclipsados por un excesivo celo en hacer una película con bonitos efectos 3D.
Creo que en el futuro se rodará para 3D sin versión en 2D. Veremos.