Hoy han sido 73.000 blogs los que han cerrado los radicales del copyright y pronto podrían ser más, y con ACTA además será legal y lo más normal. El presidente al servicio de los lobbys de unas industrias que se creen con autoridad moral para criminalizar a la ciudadanía, arremete contra la libertad de expresión y la evidencia del fracaso de modelos de negocio analógicos en la era digital.

Les molesta Internet, les molesta que el futuro ya no vaya a ser guíado por su obtusa visión. Rechazan la evidencia científica y menospreciando los documentos de los padres fundadores de los Estados Unidos, afectan al mundo entero. Porque Internet es del mundo y un ataque en un punto tendrá que tener una respuesta global.

Demuestran el miedo y en respuesta al miedo que sienten usan el terror como única y patética arma. Son previsibles. Vencen en algunas batallas, pero no convencen ya a nadie. Están, de hecho, provocando una reacción en cadena de desprecio, logran que nos unamos aun más y nos coordinemos para acabar con todo su sistema basado en el control analógico de la información y la cultura.

La gentuza tiene sus días contados porque rechazan la evidencia digital que los demás comprendemos. Esta es una lucha por la libertad. Y la guerra no la ganará ni Obama ni su dueño, Biden.

La ganarán los ciudadanos por el bien del futuro de la humanidad.

Actualización: Según parece existe una versión extendida, sin confirmar, de los hechos. Se explica en NacionRed. Por lo visto por un requerimiento del FBI para cerrar algún blog por supuestos materiales «terroristas» se acabaron cerrando todos. ¿Vemos el peligro de leyes que quitan a los jueces de en medio cuando hay tanta paranoia sobre las consecuencias a las que se pueden enfrentar los proveedores de servicios de Internet? Eso nos espera con las nuevas normas y leyes, y por el hecho de eliminar el proceso democrático de la toma de decisiones y obedecer sólo a empresas, lobbys, ya sean del entretenimiento o de construcción de armas para la guerra.